Linux: ¿qué hay detrás de este sistema operativo de código abierto?

Aunque los sistemas operativos Linux no son desconocidos, son muy pocos los usuarios que usan Linux en su ordenador privado. En el entorno de los servidores, la situación es muy diferente: aquí los sistemas tipo UNIX son la alternativa más popular a Microsoft Windows, incluso cuando difícilmente se pueden comparar.

¿Qué es Linux exactamente?

El finlandés Linus Torvalds publicó en 1991 un núcleo de sistema operativo bajo el nombre de Linux, una composición de su nombre y el modelo subyacente UNIX. Esta elemental interfaz entre software y hardware era, y sigue siendo, la base de una gran variedad de sistemas operativos, que también se conocen comúnmente bajo el nombre de Linux. La mayoría de sistemas operativos Linux se basan en gran medida en el kernel Linux de código abierto (desde 1992), así como en software del proyecto GNU. Los paquetes de kernel y software de sistema operativo se conocen también como distribuciones y son muy populares entre los desarrolladores, principalmente porque es un software que se difunde rápidamente y puede ser ajustado fácilmente a las necesidades individuales. También es posible añadir aplicaciones u otros programas (software libre o propietario), como por ejemplo la integración Adobe Creative Suite.

Con los años han sido publicadas innumerables distribuciones, así como sus bifurcaciones. Entre los sistemas operativos Linux más conocidos se encuentran Debian, su bifurcación Ubuntu, Mint, Gentoo, Fedora, Red Hat (Enterprise), openSUSE y Android.

¿Cuáles son las ventajas de los sistemas operativos Linux?

Las mayores ventajas de las distribuciones Linux incluyen bajos costes, flexibilidad y seguridad. La mayoría de distribuciones están disponibles de forma gratuita en CD o DVD o como archivos para descargar. Quien tenga un sistema Linux instalado en su disco duro, lo puede utilizar en cualquier otro ordenador con una arquitectura similar, sin necesidad de volver a instalar el software o las aplicaciones. Su diseño modular le permite al usuario decidir por sí mismo qué componentes necesita, lógicamente en función de la capacidad de procesamiento de su sistema. Dependiendo de las necesidades personales , es posible elegir entre diferentes interfaces de usuario tales como Gnome o Unity. Aquellos usuarios que decidan usar una distribución no comercial, se beneficiarán del desarrollo permanente de la plataforma por parte de otros usuarios, así como de la posibilidad de modificarla de acuerdo a las necesidades personales, completamente independiente del fabricante.

En cuanto a la seguridad, las distribuciones de Linux ofrecen funciones de cifrado gratuitas para restringir los derechos de los usuarios, evitando, por ejemplo, accesos imprevistos a la red de una empresa o la propagación de aplicaciones peligrosas. El mito generalizado de que no existen vulnerabilidades o malware para los sistemas Linux, desafortunadamente no se corresponde con los hechos. Mientras que Linux es una opción poco atractiva para el uso privado, al menos la mitad de los servidores usan Linux como sistema operativo, lo que lo convierte en un foco de gran interés para hackers o personas sin escrúpulos casi de la misma manera que lo es cualquier servidor Windows.

¿Para quién resulta pertinente el uso de sistemas operativos Linux?

Para el uso privado, Linux puede resultar atractivo si se busca una solución libre, de múltiples proveedores. Por lo general, siempre es necesario pagar por las nuevas extensiones de Windows, mientras que las distribuciones de Linux son desarrolladas y complementadas por los usuarios, por ejemplo mediante actualizaciones de seguridad. En caso de que este no sea el caso del sistema elegido, el usuario siempre puede cambiarse fácilmente a cualquier variante. Sin embargo, sí es cierto que para muchos usuarios privados resulta complicado familiarizarse con los sistemas Linux.  Incluso para aquellos usuarios Windows experimentados puede resultar difícil el cambio de entorno, especialmente por tratarse de aplicaciones desconocidas, por lo que es recomendable contar con un periodo de adaptación y estar abierto al cambio.

Por otra parte, el uso de Linux como sistema operativo para servidores está mucho más establecido. Además de las ventajas mencionadas anteriormente (flexibilidad, seguridad e independencia del fabricante) cabe resaltar los pocos requerimientos en cuanto a hardware, lo que se hace evidente en materia de licencias comparado con Microsoft, además de facilitar en gran medida el uso de la nube. Sin embargo, en el momento de decidirse por uno de los Clients es importante tener en cuenta que: aunque Linux es una solución excelente para aplicaciones basadas en la Web, tales como sistemas de comercio electrónico o CRM, Windows es líder en cuanto a servicios basados en cliente tales como Office. El hecho de que los costes de la mayoría de las distribuciones Linux sean muy bajos, o nulos, no quiere decir que sean necesariamente las más rentables: mientras que es posible conseguir el software de forma gratuita, los costos en asistencia técnica suelen ser mucho más altos.

Administración de servidores por comandos: Linux y shell

Optar por una distribución Linux implica enfrentarse a la tarea de configurar y controlar el sistema. Como usuario, para comunicarse con el servidor es necesario valerse de la ayuda de shell, la encargada de interpretar los comandos. Básicamente se pueden distinguir dos tipos de shells: una interfaz gráfica que permite operar el sistema con el ratón y utilizar símbolos, controles o widgets; y una línea de comandos gestionada manualmente donde se usa el teclado para ingresarlos. En los sitemas Linux se habla también de “terminal”.

La administración de servidores gestionada a través de comandos es compleja, pero también muy eficiente, pues permite realizar todo tipo de cambios en el sistema central. Para hacerse una mejor idea de las posibilidades que ofrece el terminal Linux, hemos recopilado una lista corta de comandos de administración:

ls Mostar el contenido de un directorio
cd Cambiar de directorio
chmod Gestionar los permisos de un directorio, por ejemplo, para un archivo
chown Cambiar el dueño de un archivo o de un directorio
mkdir Crear un directorio o un archivo
rmdir Borrar un directorio o un archivo
ps Mostrar información sobre un proceso
kill Finalizar un proceso
reboot Reiniciar el sistema
shutdown Apagar el sistema
sudo Iniciar comando como administrador
useradd Añadir usuario
groupadd Añadir un grupo de usuarios
ifconfig Configuración y estatus de la interfaz de red
curl Transferir archivos hacia o desde otro servidor
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